Es un recipiente o contenedor, metálico o plástico, que suele colocarse en las cocinas. Existen de diferentes formas: cuadrados, redondos, apilables; para interior o exterior del mueble; de un solo recipiente o varios; capacidades y colores o estampados.
Sirve para almacenar la basura que se genera diariamente. En su interior, se coloca un bolsa para evitar el contacto directo de la basura con él y facilitar su retirada del contenedor doméstico hasta el contenedor de la calle.
Habitualmente, disponen de un cierre por tapa para evitar los malos olores. Este puede ser manual o mecánico, a través de un pedal o de un sensor de apertura.
Para facilitar el reciclaje, algunos cubos cuentan con cavidades diferenciadas en su interior.
