Estilo, resistencia y mantenimiento son tres de las características que se han de tener en cuenta en la elección de la encimera. Este elemento es un imprescindible de la cocina que puede estar compuesto de distintos materiales (cuarzo y resina, piedra natural, madera maciza, laminados, cristal…).
La encimera es la base en la que se sustenta cualquier cocina. En primer lugar, porque en ella van integrados los dos elementos esenciales de esta estancia: la zona de cocción o placa y la zona de lavado. En segundo lugar, porque sobre ella se realizan tareas que requieren un lugar limpio y resistente a los golpes y a las altas temperaturas.
A continuación, detallamos uno por uno los tipos de encimeras en función del material con el que están fabricadas.
Las encimeras laminadas están realizadas en aglomerado y en la superficie llevan varias láminas para protegerlas y darles un acabado decorativo. Son fáciles de instalar y económicas. Su resistencia y durabilidad es menor que la del granito o cuarzo, pero existe un amplio y atractivo abanico de colores y efectos que se adaptan a cualquier estilo de cocina.
Además, algunos modelos pueden ser hidrófugos, es decir, con mayor resistencia al agua y humedad que el resto de encimeras laminadas.
Las encimeras de madera maciza pueden ser a medida o de medida estándar. En el primer caso se trata de maderas de denominación de origen con un tratamiento que proporciona mayor durabilidad a la madera natural. Tiene una resistencia media al impacto y al rayado y se pueden elegir hasta tres tipos de empalmes y acabados.
Por otra parte, las encimeras de madera maciza de medida estándar están compuestas por listones unidos. Para mantener su dureza, impermeabilidad, resistencia media a las temperaturas y evitar en mayor medida las manchas es conveniente aplicarle un tratamiento para protegerla.
Con las encimeras de madera maciza conseguirás un aspecto cálido y atemporal en tu cocina.
El cuarzo resiste muy bien los impactos, el rayado y la humedad al no ser poroso. Es necesario poner un protector si vas a colocar objetos a altas temperaturas. Destaca por su gran variedad de colores y acabados.
Las encimeras de cuarzo son una atractiva opción para la cocina.
El granito es un material resistente al calor, al rayado y los impactos, así como a las manchas siempre que se le aplique tratamiento hidrófugo y antibacterias. Su mantenimiento y limpieza son muy sencillos.
Las encimeras porcelánicas son altamente resistentes a la abrasión, al calor y a las manchas. Es un material muy difícil de rayar y de gran durabilidad.
También existen las encimeras porcelánicas ultracompactas que destacan por ser muy duraderas. Es un material con alta resistencia a las manchas, al rayado y al calor, con mayor resistencia al impacto. Su mayor ventaja es que no se quema y que no es porosa.
Para la gente con una estatura media que oscile entre 1,50 y 1,70 m, lo ideal es que la encimera se coloque entre 90 cm y 95. Para las personas más altas (de entre 1,90 y 2 m), su encimera debería estar a 95 cm o 100 cm sobre el suelo.
Una de las características en la que debes fijarte al elegir una encimera es la forma de sus bordes o salientes. Estos son los más habituales:
En las encimeras laminadas el copete es la pieza que remata la encimera por su parte superior y más próxima a la pared. El copete impide que el agua deteriore la encimera.
Además, también se necesitan los embellecedores que rematan las esquinas de la encimera, donde cambia de una pared a otra (rincón) y el final del copete (esquina).