Estos productos cumplen múltiples funciones para la casa. Pueden utilizarse como materiales de agarre permitiendo la unión de diferentes elementos ya que, una vez que se secan son muy sólidos y resistentes. También se usan para rellenar las juntas entre piezas de albañilería o cerámica, para construir tabiques, y para colocar pavimentos y revestimientos.
El yeso, cemento y mortero son elementos imprescindibles en la construcción o albañilería por su resistencia, su fuerza de cohesión y estabilidad.
Un mismo material puede ofrecer muchos usos diferentes: unir piezas como los ladrillos, revestir paredes y suelos o cubrir superficies, impermeabilizar, aislar y ofrecer un uso decorativo.
Los aditivos se pueden añadir para potenciar las propiedades del material o para darle el acabado estético que mejor se adapte a la vivienda.
¿Qué es?
El yeso es un material que se endurece rápidamente cuando se mezcla con agua y puede actuar como conglomerante (material que une, pega o aglomera otros materiales). El yeso puede ser uno de los componentes para formar mortero
Al ser permeable al agua solo se puede usar en el interior de la casa. Es un buen aislante térmico, regulador de la humedad e ignífugo (resistente al fuego).
Las manchas en yeso se limpian con agua caliente y detergente.
¿Para qué se usa?
El yeso se usa generalmente en la construcción para enlucir, alisar superficies rugosas o con gotelé, cubrir superficies como surcos o canales abiertos en una pared para empotrar tuberías, cables… y para pequeñas reparaciones.
Tipos de yeso:
Preparación del yeso.
El yeso se mezcla con agua: una parte de agua por cada tres cuartas partes de yeso. El tiempo de fraguado (endurecimiento) depende de la densidad de la mezcla de yeso y agua que haya resultado.
¿Qué es?
El mortero es una masa formada por agua, arena y conglomerante (material que une, pega o aglomera otros materiales), ya sea cemento, yeso o cal.
Puede contener aditivos que, añadidos al mortero en una pequeña proporción, son capaces de modificar y potenciar algunas de sus propiedades originales. Por ejemplo, existen aditivos plastificantes que mejoran la cohesión y la resistencia; emulsionantes que mejoran la adherencia para revestimientos; aceleradores del fraguado para taponar vías de agua; y también impermeabilizantes indicados para aplicaciones en fachadas, sótanos, pozos o piscinas.
¿Para qué se usa?
Sirve como material de agarre y unión. Se emplea para unir elementos como los ladrillos, crear muros y cubrir superficies, revestir paredes, reparar desconches… También existen morteros de impermeabilización y autonivelantes para aplicar sobre soportes irregulares.
¿Cómo se prepara el mortero?
Tienes que mezclar la arena y el aglomerante (yeso, cemento, cal) en seco. A continuación, se hace un hueco en el centro y se añade agua poco a poco, sin parar de remover. Una vez hecha la mezcla hay que aplicarla durante la primera hora. Debes saber que no debes aplicar un mortero por debajo de 5°C ni por encima de 30°C.
Consejo: Si quieres una mezcla homogénea se puede usar un mezcladora para que esté garantizada la homogeneidad y para facilitar su aplicación posterior.
Cómo calcular el volumen de hormigón necesario
Volumen de hormigón = longitud x ancho x altura
Ej: 10 x 5 x 0,3 m = 15 m3
Tipos de mortero
Hay diferentes morteros en función del aglomerante:
Por otra parte hay morteros ya preparados (que no necesitan hacer la mezcla con cemento, cal, etc). Dentro de estos morteros ya preparados encontramos diferentes clases en función de su uso:
En el caso de la cerámica hay distintas variedades de cemento cola en función del tipo de cerámica que se desea pegar (azulejo, gres, gres porcelánico…), del lugar de instalación (interior o exterior) y del tipo y el tamaño de la pieza. El tipo de cemento cola también varía según las condiciones climatológicas a las que se va a exponer el suelo cerámico: agua, calor, hielo y deshielo.
Por eso, los cementos cola se clasifican en dos tipos (C1 y C2) en función de su mayor o menor adherencia:
Por otra parte, también habrá que elegir el cemento cola en función del grado de deformabilidad o elasticidad que se necesite (S1 o S2). Cuanto mayor sea la deformabilidad del cemento cola, mayor será su capacidad de compensar las tensiones entre el soporte (superficie del suelo sobre el que se coloca la baldosa) y la propia baldosa.
Otra propiedad de los cementos cola es su capacidad de antidescuelgue o deslizamiento reducido (se especifica con la letra T). Esto evita que los azulejos se muevan una vez instalados y pierdan adherencia. La T puede ir acompañada de E, que es el tiempo abierto ampliado (intervalo máximo de tiempo tras la aplicación del adhesivo, durante el cual las baldosas pueden ser colocadas sin perder adherencia).
Para aplicar el cemento cola es necesario que la pieza de cerámica esté seca y limpia. Se aplica una capa fina, de menos de 0,5 cm, con una llana en toda la pieza cerámica y en la superficie sobre la que se va a adherir el azulejo o baldosa.
¿Qué es?
El cemento es una mezcla de arcilla, caliza, grava y otros materiales que se mezclan con agua. Es un material aislante térmico, acústico y eléctrico. La pasta resultante es de rápido secado por lo que hay que utilizarla inmediatamente. El cemento seco es muy pesado por lo que se coloca sobre vigas, encofrados o columnas.
- Ya hemos visto que si el cemento se mezcla con agua y arena se obtiene el mortero.
- Por otra parte, si se mezcla cemento con agua, arena y grava, el resultado es hormigón
¿Para qué se usa?
Es un material imprescindible en la construcción. Su uso más común es el de aglomerante. También se emplea para suelos donde se necesita una superficie lisa y sin obstáculos y para fabricar baldosas. Se puede usar en condiciones de bajas temperaturas por ser un material exotérmico (desprende calor).
Tipos de cemento
Hay distintos tipos en función de factores como el tiempo de secado (los de secado rápido se usan en trabajos de albañilería que requieren celeridad como un escape de agua en una tubería…), de su flexibilidad, entre otros.
El cemento puede tener aditivos que mejoren sus propiedades elásticas, hidráulicas o su aspecto. Puede pigmentarse y pintarse, alisarse y tratarse.
¿Cómo se prepara el cemento?
Hay que verter el cemento poco a poco y removerlo constantemente para conservar el espesor y textura apropiados.
La superficie sobre la que se va a aplicar el cemento, el mortero o el yeso debe estar limpia, sin polvo, aceites, pinturas o cualquier resto de suciedad y también nivelada.
Es muy importante respetar los tiempos de secado que aconseja el fabricante del producto para que no se deterioren las propiedades del material y para lograr un agarre perfecto.