Cubiertas, sótanos y ventanas son los puntos por donde más se escapa el calor o el fresco de tu casa, pero no son los únicos. Suelos, puertas de entrada y garajes también son lugares en los que se produce una elevada transmisión térmica y acústica.
Si tu casa es una vivienda unifamiliar, tienes que prestar especial atención a cubiertas, sótanos y ventanas. Son los puntos por donde se puede escapar el calor o el fresco de tu casa, suponiendo un coste extra de energía. Revisa los planos de su construcción y la memoria de materiales y comprueba qué tipo de aislamiento tiene. Probablemente puedas mejorar muchos aspectos.
En este dibujo puedes ver por dónde se producen las pérdidas de calor en una vivienda unifamiliar.
Hay múltiples tipos de aislamiento térmico dependiendo de si quieres aislar las cubiertas, la fachada, las puertas y ventanas o los suelos.
En viviendas unifamiliares, puedes mejorar el aislamiento tanto desde el interior como por el exterior, combinándolo con una correcta impermeabilización.
Por el interior puedes usar tanto placas rígidas de diferentes materiales aislantes, como poliestireno expandido o extruido, o mantas y placas blandas: lanas de roca, fibras de vidrio, corcho, geotextil, de aluminio y burbujas...
Por el exterior se suelen utilizar placas rígidas o flexibles de poliestireno extruido, impermeables al agua, colocadas sobre el forjado de hormigón y bajo la placa de Onduline o similar.
Si tienes buhardilla, aunque no la uses, no dejes de aislarla. Además de ganar una habitación que puedes usar en el futuro, evitarás que, a través de ella, se pierda el calor de los pisos superiores de la casa. Si quieres saber cómo hacerlo, consulta Cómo aislar una buhardilla.entanas o los suelos.
Tanto en viviendas unifamiliares como en pisos es interesante la colocación de una cubierta vegetal, que es posible hasta en tejados con un 45% de inclinación. Las cubiertas vegetales no solo protegen la casa de la insolación en verano, con lo que se ahorra en refrigeración, sino que también son una manta térmica en invierno y contribuyen a mejorar el medio ambiente.
Deberás tener en cuenta las normas estéticas que afecten a las fachadas de tu localidad o comunidad de vecinos. En cualquier caso, respetando el aspecto, siempre puedes acometer mejoras en el exterior de la vivienda. Esto es sencillo si la fachada es de mortero o revoco, ya que sobre el aislamiento elegido (que debe ser apropiado para el exterior) puedes aplicar el revoco. Aprovecha cualquier renovación que necesites hacer en la fachada, como reparar el revoco o eliminar grietas, para mejorar su aislamiento.
Si la fachada es de ladrillo visto y no puedes alterar su estética, tendrás que colocar el aislamiento por el interior (lana de roca, planchas de poliestireno, corcho, fibra de vidrio) o, si tiene cámara de aire, inyectarlo en el interior del muro.
La sustitución de ventanas es una de las acciones más efectivas para aumentar el aislamiento térmico de tu casa.
Si tus ventanas están viejas y tienes que sustituirlas, elígelas con doble acristalamiento 4-16-4. Las que proporcionan un mayor aislamiento son las fabricadas en PVC con cámara de aislamiento y en madera (aunque este material presenta otros inconvenientes). En cualquier caso, especialmente si las eliges de aluminio, debe ser con rotura de puente térmico (RPT) y con las ventanas más eficientes que encuentres.
Si tus ventanas están en buen estado, puedes dejarlas y colocar doble ventana. Es decir, una segunda ventana por el interior o por el exterior que permita que se cree una cámara de aire entre ambas y mejore el aislamiento térmico (y acústico).
En cuanto a las puertas, si decides cambiarlas, especialmente la puerta de la calle y del garaje, elige materiales que no favorezcan la transmisión térmica. Las puertas de metal son las que más dejan escapar el calor. Además, coloca barras, tiras y burletes, de espuma bajo puerta y sustitúyelos cuando estén viejos.
Especialmente en el caso de los suelos de plantas bajas debes colocar un aislante sobre el hormigón del forjado. Además, antes de echar el mortero necesitarás colocar una membrana impermeabilizante sobre el aislante. El gran enemigo de la eficiencia térmica es el enfriamiento (y también deterioro) de los materiales, que se produce por la humedad del terreno.
En sótanos enterrados bajo la vivienda, combina en la solera materiales aislantes e impermeabilizantes. Lograrás que el propio sótano actúe como cámara, protegiendo térmicamente tu casa.
Además, es importante que aísles los suelos de las zonas con calefacción que están en contacto con zonas no calefactadas, como los pavimentos que se sitúan directamente encima de garajes y sótanos.
Los puentes térmicos de una vivienda son aquellas zonas de su envolvente que suponen una junta entre materiales de diferente tipo y presentan una mayor transmisión térmica que el resto de los elementos constructivos, al producirse una discontinuidad en la barrera aislante.
Por los puentes térmicos se escapa el calor del hogar en invierno y entra el frío exterior, por lo que hay que reducirlos al máximo para ganar en eficiencia energética.
Encuentras puentes térmicos en: