Levantar tabiques con hormigón celular está al alcance de cualquier aficionado. Para su construcción no se requiere de hormigonera ya que las piezas se colocan directamente con cemento cola, son menos pesadas que los ladrillos o la piedra y resisten muy bien las inclemencias. Las herramientas que se usan son muy sencillas y básicas.
La preparación del mortero cola es muy importante. Debes hacer únicamente la que creas que vas a utilizar. Vierte agua en un recipiente de plástico y a continuación la cantidad de mortero recomendada. Bate con una mezcladora hasta obtener una masa homogénea y deja reposar 10 minutos.
2.1. Coloca la primera hilera nivelada sobre doble lecho de mortero de cemento con una placa de impermeabilización bituminosa. Deja secar 24 horas antes de continuar.
2.2. Colocación sobre mortero hidrófugo. Mezcla la pasta, extiende una capa sobre el suelo y nivela las piezas. Deja secar 24 horas antes de continuar.
2.3. Sobre base lisa, seca e impermeabilizada y perfectamente nivelada, extiende una fina capa de mortero cola con la llana dentada del ancho de las piezas. Se puede continuar sin dejar secar con las siguientes hileras.
3.1. Coloca la primera pieza en un extremo del muro sobre un lecho de mortero y comprueba su nivel. El lecho de mortero permite salvar los posibles pequeños desniveles en la primera hilera.
3.2. Haz lo mismo en el otro extremo del muro. Clava dos clavos en la base superior del bloque celular y ata un cordel. Pásalo por el extremo exterior. Te ayudará a llevar todas las líneas iguales.
3.3. Extiende mortero cola en la junta vertical del primer bloque y coloca el siguiente bloque, con una parte machihembrada. La continuación con bloques machihembrados no necesita la aplicación de mortero cola en la junta vertical.
3.4. Sigue colocando bloques de la misma manera hasta llegar al otro extremo. Si en la última pieza no cabe una entera tendrás que cortar una pieza a medida.
3.5. Para terminar una hilera hay que encajar una pieza cortada a medida. Aplica pelladas de mortero cola en la parte lisa de la pieza. No es necesario encolar en el lado machihembrado. Encaja la pieza y remata la junta con la paleta. Comprueba el nivel.
4.1. Mide con un flexómetro el ancho justo de la pieza que necesitas.
4.2. Marca el corte sobre la pieza con ayuda de un lápiz y una escuadra metálica.
4.3. Coloca la pieza entre dos pilas de bloques que te sirvan de apoyo; corta con la hoja del serrucho hasta seccionar. Lija la superficie cortada.
5.1. Si la primera fila se coloca con mortero de cemento hay que esperar 24 horas para continuar. Comprueba si hay pequeñas irregularidades en la base de la superficie de la primera fila. Si es así, lija con un trozo de hormigón o una tabla de lijar y limpia.
5.2. La segunda hilera hay que colocarla de tal manera que las juntas queden alternas. Comienza con media pieza. Extiende con la llana dentada el mortero cola en la base de la hilada anterior y coloca las piezas, machihembradas, unas junto a otras. Completa el muro de la misma manera.