Si hay problemas con la circulación de agua en tu sistema de riego enterrado quizás haya que arreglar la electroválvula. Si ha disminuido el caudal es posible que tenga una obstrucción, o si el sistema ha dejado de funcionar por completo seguramente haya un fallo eléctrico. A continuación te enseñamos a detectar cual puede ser el problema y a repararlo.
1.1 Corta el agua y accede al mecanismo.
1.2 Desmonta el cuerpo de la electroválvula aflojando los tornillos del cuerpo. Ten cuidado al sacar la tapa porque entre la membrana y la tapa hay un muelle.
1.3 Lava la membrana con agua corriente retirando todos los restos de tierra, si está rota tendrás que sustituirla por una nueva. Monta la membrana limpia o la nueva y el muelle en el mismo orden, coloca la tapa y aprieta los tornillos.
1.4 Coloca el solenoide y abre el paso del agua. Prueba la electroválvula de forma manual. Afloja el tapón de purga y la parte alta y comprueba si permite el paso de agua a los difusores y que el solenoide se abre y cierra.
Si crees que puede ser eléctrico, busca el problema en la conexión de los cables, en el programador o en el solenoide, puede que baste apretar los cables, reprogramar el programador o cambiar el solenoide de la electroválvula por uno nuevo.