Las estufas de pellets funcionan por combustión, lo que genera residuos. Además, generan un calor ecológico y eficiente y permiten disfrutar del encanto y la belleza del fuego. Pero para que funcionen bien ahora que se acerca el frío y no consuman de más, han de estar bien limpias y mantenerse así durante toda la temporada. Conservarla limpia y en perfectas condiciones te va a garantizar un alto rendimiento de la estufa y disfrutar del máximo confort.
Existen dos tipos de limpieza de estufas de pellets, la que se debe hacer de forma diaria y la limpieza de mantenimiento cada dos meses aproximadamente. El proceso es bastante parecido. Si tienes dudas sobre cómo limpiar una estufa de pellets y cómo mantenerla en perfectas condiciones, no te pierdas estos dos paso a paso donde te explicamos cada proceso.
Para empezar con la limpieza diaria de tu estufa de pellet es importante que extraigas el quemador utilizando guantes y mascarilla.
Aspira los posibles residuos que queden en la estufa. Limpia bien todos los orificios de paso de aire para que haya una buena combustión.
Hazlo también en la zona de quemado y elimina todos los restos de hollín y cenizas que hayan quedado.
Comprueba que el orificio de la resistencia de encendido queda libre.
Aspira las juntas de la puerta, las paredes de la estufa y los cristales.
No se ven y están alojados en cilindros internos de la máquina, pero pueden tener también restos a limpiar.
Además de los pasos que hemos mencionado previamente para realizar una correcta limpieza diaria de nuestra estufa de pellets, es importante que realices algunas tareas cada varios meses o de forma anual para un correcto mantenimiento de la estufa.
1. Revisa la aspiradora y extrae las cenizas que haya en su interior.
2. Limpia bien el cajón y no dejes nada de polvo.
3. Limpia los cristales usando algún producto específico.