La pizarra y la cuarcita son la mejor elección si optas por un suelo de piedra para el jardín. Tienes infinidad de posibilidades para elegir.
La piedra natural es un material clásico para jardines o terrazas que combina perfectamente con la vegetación, la madera y los materiales metálicos, naturales y sintéticos del mobiliario. Puedes elegir entre una amplia gama de texturas, tonos y formas, en piezas regulares e irregulares, o planchas multicolores. Para los suelos de exterior te recomendamos pizarra y cuarcita.
Se caracteriza por su grano fino y un alto grado de resistencia y dureza. Con capacidad aislante e impermeable, resulta muy adecuada para delimitar zonas, revestir jardineras, en muretes o como pavimento de senderos o terrazas. Sus tonalidades, desde el negro azulado y los grisáceos a los rojizos y verdosos, se suman a una singular textura en forma de finas láminas.
Por su alto contenido de cuarzo (entre un 90 y un 99%) y su naturaleza metamórfica, la cuarcita ofrece una gran resistencia a los cambios de temperatura. Puede ser blanca, gris, amarilla, rosada o rojiza, y lucir un acabado liso o rugoso, cualidades que la hacen sumamente versátil desde el punto de vista decorativo.