El agua es un bien que no se debe malgastar. No solo por dinero, sino porque tan solo habría que utilizar la que se necesita. En el uso del inodoro es donde se va una parte importante de la factura del agua, por eso es conveniente regular los mecanismos de llenado y de vaciado del agua de la cisterna, para usar según las necesidades de cada momento. Esto es muy importante según el número de personas de la casa, pues el gasto se multiplica.
Pulsador interrumpible
El más sencillo. Permite interrumpir la descarga del tanque cuando se desea pulsando una segunda vez.
Pulsador doble
Dos varillas con sus correspondientes pulsadores accionan la descarga total o parcial.
Pulsador de cable
Muy fácil de instalar. El cable es el que acciona las distintas descargas, según el botón que se pulse.
Convencional
Con una boya exterior sujeta por una varilla al propio grifo. Se eleva a medida que sube el nivel del agua en la cisterna. Con ella la cisterna se llena de manera más lenta.
De doble uso
El grifo se adapta al orificio del inodoro, sea en una pared lateral o de salida inferior.
Compacto
La boya o flotador telescópico está integrada en la misma estructura de la válvula. Es de llenado más rápido y se regula con una varilla.
Servo
De llenado más rápido y silencioso. De aspecto similar a los compactos, incorporan filtros que frenan las impurezas del agua, alargando la vida del mecanismo.
1.1. El mecanismo de descarga se puede regular para controlar los distintos vaciados de agua de la cisterna, mayor o menor, según las necesidades. Uno de ellos regula la descarga mayor. Ponlo en la posición que desees. Regulará el nivel de agua residual que queda en el tanque después de la descarga. La descarga máxima optima se estima en 6 litros, aunque puedes regular más o menos, según la capacidad del tanque.
1.2. Para un mayor ahorro, no siempre es necesario utilizar la misma cantidad de agua tras cada uso del inodoro. Por ello puedes regular la cantidad de agua mínima que quieres que se expulse tras la pulsación. Normalmente esta cantidad se estima en 3 litros, pero tú lo puedes regular según creas.
1.3. El ahorro también se consigue con el llenado. La válvula o grifo de llenado permiten que entre en la cisterna más o menos litros de agua. Una barra reguladora que se controla con un destornillador marca la posición del flotador de llenado que cierra el paso del agua, cuando se llega al nivel ajustado.
1.4. Las formas de descargar el agua de la cisterna varían. Debes escoger las más ahorradoras, las que permiten varias posibilidades de descarga. El pulsador interrumpible es una de ellas. Este dispositivo es muy sencillo de usar. Con una primera pulsación se abre la descarga y con otra se cierra el paso, por lo que puedes calcular el nivel de descarga según creas conveniente.
1.5. Los pulsadores dobles se regulan de varias formas. El modelo más tradicional consta de dos varillas que se meten y regulan a diferente altura con un destornillador. Uno es para la descarga de agua parcial y el otro para la descarga grande.
1.6. Otra forma de accionar el mecanismo de doble descarga es con el pulsador de cable. Un fino cable resistente, también a la corrosión, sirve para la descarga mayor o menor, según sea la graduación hecha. Acopla a presión el terminal del cable en el pulsador exterior y cierra la tapa de la cisterna.