Lo primero es cortar las piezas de metacrilato que convertirán los estantes en maceteros. Para ello, retira el plástico protector de la pieza y coloca encima el estante, que hará de plantilla. Marca con un rotulador indeleble la parte exterior del estante sobre el metacrilato. Y luego otra pieza, marcando por el interior del estante. En esta última haz una línea por la mitad ya que solo se usará una parte (es la pieza frontal).
Fija la plancha de metacrilato con gatos a la mesa o banco de trabajo y corta con una segueta las piezas señaladas.
Con una pistola termosellante aplica un hilo de silicona caliente en el borde del estante, justo por el interior, y fija la tapa de metacrilato delantera, que es la que va a la mitad.
Así que aplica la silicona solo hasta donde alcanza el metacrilato.
A continuación pega la pieza trasera, con un hilo de silicona caliente en el canto trasero.
Una vez que esté seca la silicona con la que has fijado las piezas de metacrilato, mide por la parte que quedará pegada a la pared el centro del estante y, con ayuda del taladro, realiza un agujero para colocar la alcayata.
Realiza tu arreglo con plantas crasas y mini cactus, que son variedades que no necesitan demasiado riego.
Primero coloca un poco de tierra en la base, a continuación, introduce gravilla blanca y, por último, las plantas.