1.1. Las medidas. Marca sobre los listones de madera la medida de cada pieza. Fíjate en el diseño del taburete: cada uno necesita 4 piezas largas para las patas y 5 cortas para unir las patas en la base y colocar a diferentes alturas para apoyar los pies.
1.2. Cortar. Con la minisierra, corta los listones por las marcas realizadas, fijando con gatos la madera a la mesa o banco de trabajo.
Marca sobre el tablero de madera las medidas del cuadrado de la base del asiento. Deberás cortar dos piezas idénticas: una será la base vista (e irá pintada en dorado como el resto de la estructura) y otra será la que usarás para tapizarla.
Con un rodillo y pintura dorada, pinta todas las piezas de listones de madera ya cortadas y una de las bases del asiento. Deja secar antes de aplicar una segunda capa de pintura.
Ahora ya puedes dar forma a la base del taburete uniendo las piezas con tornillos.
Empieza por las patas y los travesaños cortos y remata con la pieza cuadrada que hará de base del asiento.
5.1. Colocar la espuma. Coloca la pieza cuadrada de madera sobre la espuma de alta densidad y corta dejando unos centímetros alrededor.
5.2. La tela. Ahora estira la tela elegida estirada sobre una superficie plana, con el derecho pegado a la mesa. Sitúa encima la espuma ya cortada y la madera (en este orden). Debes cortar la tela con margen suficiente para llevarla hasta la madera y poder fijarla con grapas.
5.3. Grapa. Con la grapadora de tapicero, fija la tela a la madera, estirándola bien para evitar que queden bolsas o arrugas.
Con tornillos, fija el asiento tapizado a la base del taburete pintada en dorado.
Nuestra recomendación: como según la altura que decidas darle a tu taburete, este puede perder algo de estabilidad cuanto más alto sea; la solución es que todas las patas queden unidas entre sí con piezas horizontales cortas, tanto en la base de las patas como a media altura, y con pletinas o piezas metálicas en forma de L, fijadas con tornillos a cada pata y la base del asiento.