Las amoladoras, cuyo nombre profesional es amoladora angular, también son conocidas popularmente como radiales. La amoladora es una herramienta que hace girar un disco a muy altas revoluciones. En función del disco elegido se pueden realizar tareas de bricolaje diferentes, principalmente cortar, lijar y pulir.
Cuestiones que debes saber sobre los discos de amoladoras:
Tan importante es tener una buena amoladora como disponer de discos de buena calidad, para que los cortes o la actividad que realices sean perfectos.
Cuanto más grande sea el disco más potencia de motor necesitará tener la máquina en la que se coloque.
Los discos de amoladora están diseñados para realizar diferentes tareas de bricolaje. ¿Qué necesitas hacer con tu disco de amoladora?
Cambiando el disco puedes usar la amoladora para todas estas tareas.
A la hora de elegir un disco de amoladora debes tener en cuenta en qué herramienta vas a colocar el disco para realizar el trabajo, ya que cada amoladora usa discos de un diámetro de disco determinado: el diámetro del disco determina la profundidad de corte máxima que se puede realizar. Si el diámetro del disco es pequeño se gana en estabilidad y la anchura de corte es menor.
El material sobre el que trabajarás es fundamental para elegir el disco de tu amoladora; es imprescindible elegir el disco de sierra en función de la superficie sobre la que se va a trabajar (cerámica, metal, piedra, multimaterial…). Nunca uses un disco para otro material del que está recomendado.
Discos para trabajar sobre objetos de aluminio.
El cambio del disco en una herramienta es muy sencillo. Desenchufada la herramienta de la corriente eléctrica y pulsa el botón que bloquea el eje de la herramienta. A continuación desenrosca el disco y retíralo. Una vez cambiado por el nuevo y colocado en la dirección de corte que viene definido en el disco, hay que apretarlo y ajustarlo con la tuerca de sujeción de la herramienta para que no se mueva. Es muy importante que el disco esté bien ajustado para evitar que la hoja vibre y que el corte se desvíe y sea deficiente.
Es muy importante cuidar el lavado de las hojas para mantener la sierra en perfecto estado y que no se resienta su rendimiento en el corte. Hay que limpiarlas con un producto no abrasivo. No debes limpiar la hoja rascando con objetos puntiagudos ni objetos que deje deshechos. Por último, tienes que secar la hoja con un trapo suave.