Las fresadoras eléctricas están ideadas para labrar madera y metales y poder conseguir acabados muy decorativos. Es una herramienta que ofrece muchas posibilidades para hacer trabajos creativos con la madera o el metal gracias a los numerosos accesorios de los que dispone.
La fresadora es una herramienta eléctrica que sirve para abrir agujeros y, en general, labrar y trabajar madera (que es su uso principal en tareas de bricolaje), MDF, plástico, metal, incluso planchas de cartón yeso.
¿Cómo funcionan las fresadoras? Permiten trabajar esos materiales gracias a sus cuchillas que trabajan en movimientos circulares continuos.
Usos
Estas herramientas se utilizan para hacer estanterías, baúles, piezas de ensamblado o molduras, cajeados, bajorrelieves u otro tipo de pieza decorativa de madera, ranuras y ensambles, perfilados sobre tableros, muescas o huecos en una superficie para que pueda encajar con otra. El resultado final es tan preciso que la superficie queda lisa, sin necesidad de lijarla.
Partes
Las fresadoras tienen dos mangos, dos columnas regulables en altura para graduar la profundidad según el tipo de corte que se quiere hacer, pinza portafresas o husillo. El husillo se está verticalmente en la herramienta y perpendicular a la mesa de trabajo. Las fresas de corte se montan en el husillo y giran sobre su eje para trabajar.
Tan importante es elegir una fresadora de calidad como utilizar fresas en buen estado y bien afiladas para evitar roturas y agilizar el trabajo. Existen distintos tipos de fresas que se irán cambiando en función del trabajo que quieras realizar:
POTENCIA
La potencia determina la capacidad de trabajo de la fresadora. Se mide en vatios (W) y las hay desde 1010 w hasta 2050 w.
VELOCIDAD
Es importante que la fresadora tenga varias modalidades de velocidad. Cuando es regulable permite adaptarse a la dureza de los distintos materiales en cada momento. Por ejemplo, para trabajar madera se necesita la máxima velocidad; pero para trabajar plásticos o metales se recomiendan velocidades más bajas para no dañar la pieza con las altas temperaturas que coge la fresa en contacto con el material.
DIÁMETRO DEL CASQUILLO O DE LA PINZA
Se mide en milímetros. Los hay de 6 mm, 8 mm y 12 mm. Si tienes un diámetro de la pinza de mayor diámetro te permite utilizar fresas más gruesas.
La fresadora debe contar con pinzas de, como mínimo, 6 mm y 8 mm. Se usan para tareas habituales de bricolaje.
Las de 12 mm se usan para trabajos en los que se necesita una potencia mayor (por lo que es el que suelen llevar las fresadoras más potentes), más longitud de carrera. Esto permite poder instalar más variedad de fresas.
PESO
Para trabajos comunes, el peso de la fresadora oscila entre 2 kg y 4 kg.
PROFUNDIDAD DE CORTE O LONGITUD DE CARRERA
La función de la fresadora es precisamente penetrar en el material que se trabaja. Esa capacidad varía según la herramienta: el mínimo básico es de 40 mm y puede llegar a los 65 mm de profundidad de corte en las fresadoras más potentes.
ACCESORIOS
Los accesorios para fresadoras más habituales son: