Ideas para decorar jardines rústicos y con encanto
¿Recuerdas cómo eran tus veranos cuando eras niño? La casa del pueblo… ¡Cómo te gustaba estar allí! El aroma de la hierbabuena, los árboles de tu abuelo, sus herramientas y hasta el bocata de la merienda. Todo tenía sabor a verano. Recrea en tu casa un jardín de lo más rústico, igualito que el del pueblo. ¡O incluso mejor!
Los jardines rústicos se caracterizan por su palpable conexión con la naturaleza. No solo en la elección de las plantas, árboles y flores que le darán vida, sino también los elementos arquitectónicos que lo rodeen y el tipo de decoración que elijas. Todo suma para recrear en tu jardín una auténtica casa de campo. Los suelos de baldosas de barro van intrínsecamente unidos a este estilo. Evocan a las casas de campo y de montaña y aportan mucha calidez. Y, aun con los diseños más innovadores, son un nexo con el pasado, y, ahora, más de moda que nunca.

La piedra es otro de los elementos clave de los jardines rústicos. Puedes utilizarla para marcar los caminos o para crear bellos parterres con tus flores y plantas. Y, si forma parte de la fachada de tu casa, dale un especial protagonismo. La piedra tiene la propiedad de mantener tu casa más fresca en verano y más cálida en invierno. ¡Y sus acabados son preciosos!
Si las piedras te parecen una opción arriesgada para empezar a convertir tu jardín en uno propio de una casa de campo, los áridos decorativos te pueden ayudar. Los hay de diferentes colores y tamaños, de manera que podrás crear diferentes composiciones y delimitar espacios en tu jardín. También pueden marcar los caminos o utilizarlos como mulching para las plantas. Mantendrán la humedad de tus plantas y evitarán la propagación de malas hierbas. ¡Tendrás un jardín rústico bajo control y muy rural!

La piedra también sirve para lucir mesas y bancos exteriores. Tener mobiliario de este material es tener una joya en bruto que perdurará el resto de tu vida.