Hazte con un huerto urbano y descubre la pasión de cultivar
Vivir en la ciudad no significa darle la espalda a la naturaleza y menos ¡a la siembra y recolección! Tareas muy de campo pero que conquistan la ciudad. Y es que hasta al urbanita más empedernido le gustan las cosas naturales. ¿Quién se resiste a unas sanas y ecológicas hortalizas y verduras cultivadas por uno mismo con todo mimo y cuidad? Para disfrutar de estos placeres solo necesitas hacerte con un huerto en casa. ¡Sí, sí, en la ciudad! ¡Sí, sí, para ti! Del huerto a tu mesa será más verdad que nunca después de leer este artículo para recién estrenados horticultores cosmopolitas.
Para todos aquellos que viven en grandes ciudades es imprescindible encontrar soluciones que les ayuden a volver a lo natural, a lo auténtico, a la vida serena. Unos lo encuentran saliendo al monte cada fin de semana, mientras que otros hacen todo lo posible por tener en casa una parcela dedicada a lo rural o campestre.
Por eso, cultivar un huerto urbano es todo un descubrimiento. Volverás a hacer cosas sencillas y gratificantes como cuidar las plantas, observar el crecimiento de las lechugas o ver cómo maduran los tomates. Y después, podrás saborear alimentos ricos, sanos, producidos por ti mismo… ¡100% eco! ¿Qué más se puede pedir?
Tener un huerto urbano en casa solo tiene ventajas. Además, si hay peques en casa ellos también disfrutarán y aprenderás con algunas tareas agrícolas básicas: sembrar, regar, quitar las malas hierbas, abonar, recolectar…
Relájate con las tareas de siembra y recolección, será tu secreto para olvidarte del estrés y además llenar tu nevera de verduras y hortalizas. ¡Que satisfacción! Cultivadas por ti.