Si has decidido aprovechar la zona más complicada de la buhardilla para poner un armario, plantéate equiparlo con accesorios que hagan más fácil la tarea de guardar o sacar las cosas. Los huecos bajo techos inclinados resultan algo incómodos a la hora de acceder a ellos. Por eso, contar con elementos extraíbles como cestas para camisetas o ropa de cama, barras abatibles o porta perchas te facilitará la tarea a la hora de organizar.
Cuando los armarios están situados en la parte baja de un techo inclinado, no suelen ser muy altos. Por eso, merece la pena intentar duplicar el empleando los accesorios adecuados. Por ejemplo, las cestas de rejilla permiten guardar muchas prendas y complementos en espacios mínimos. En distintos tamaños, ofrecen cabida a bolsos, prendas dobladas, ropa de invierno… Con la ventaja de que aportan ventilación. Como son extraíbles, con estos accesorios podrás guardar y coger las prendas sin tener que agacharte o arrodillarte.
¿Tu armario llega hasta la cumbrera del tejado? Entonces, con una barra o colgador abatible accederás fácilmente a las prendas situadas en la parte más alta del armario. Solo tendrás que tirar de la barra central para que la ropa “descienda” hacia ti.
Un buen armario de buhardilla no puede prescindir de un zapatero. De hecho, es habitual que los zapatos y botas de temporada los guardemos en estos espacios, dejando los roperos del resto de la casa para las prendas que se utilizan a diario. ¿El armario no es muy grande? Existen zapateros extraíbles para laterales, con capacidad para dos pares de zapatos. Con sistema de guías extraíbles, podrás alinearlos en los laterales sin ocupar más de lo necesario.