Viste las paredes de tu casa con revestimientos de pared para darles el toque decorativo que necesitan. Existe un amplio abanico de posibilidades, estilos, colores y decorados para que elijas el que mejor combine con tu habitación.
Instalar revestimiento mediante adhesivo es una solución sencilla y decorativa que no necesita de obras y están pensados para todas las estancias de la casa, incluidas las que tienen humedad como baños y cocinas. Sirve también para instalar en techos.
La instalación de revestimiento mediante adhesivo es fácil y no requiere ningún tipo de obra. Basta con pegar con masilla o adhesivo de doble cara.
Los revestimientos de PVC y vinilo pueden colocarse también en zonas húmedas como baños y cocinas.
Los revestimientos adhesivos pueden destinarse tanto a zonas secas como húmedas. Existen revestimientos adhesivos de dos tipos de materiales: PVC y vinilo.
El PVC y el vinilo son materiales con poder aislante tanto acústico como térmico, gracias a su material y estructura.
Su principal ventaja es que es un revestimiento muy apropiado para zonas con humedad como pueden ser el baño o la cocina, ya que este material no permite la formación de moho o la acumulación de gérmenes. Incluso si se trata de espacios poco ventilados.
Su uso está recomendado para cualquier tipo de estancia (recibidores, despachos, habitaciones, salones, baños y cocinas). Otro de sus usos más habituales es para revestir el techo.
Pueden imitar la madera, la cerámica, la estética del metal, cemento, textil… Los hay tanto para usar como revestimiento interior como para exterior.
Su mantenimiento es sencillo: se limpia con una esponja y limpiador doméstico.
En cuanto a sus particularidades, el PVC permite elegir formatos más grandes (suelen ser lamas grandes), lo cual facilita su colocación en superficies de gran tamaño como paredes completas. Por su parte, el vinilo tiene un mejor comportamiento acústico.
La forma de colocación es muy fácil y no requiere obra. El tiempo estimado de montaje es de 30 minutos por metro cuadrado.
Puedes elegir la colocación de los revestimientos en función del efecto que quieras conseguir y de tus gustos personales.
Este tipo de instalación permite alargar visualmente la estancia.
Se trata del revestimiento que no cubre la pared completa; solo reviste la mitad de la superficie dejando a la vista la parte superior.
La superficie tiene que estar limpia, seca y libre de muebles o sanitarios, accesorios murales, enchufes, etc.
En el caso del revestimiento vinílico, puedes aplicar una imprimación a la pared antes de colocar el revestimiento para que el adhesivo se agarre mejor. Es opcional, recomendado sobre todo para paredes que suelan tener polvo.
Debes evitar que las juntas de las lamas coincidan en el mismo punto en cada fila o columna.
Recuerda que debes poner los perfiles para las terminaciones de la superficie y perfiles para rematar los ángulos de las esquinas.
Una vez instalado el revestimiento ya puedes colocar elementos decorativos sobre la pared como percheros, muebles, cuadros… Solo es necesario usar tacos y tornillos específicos que atraviesen la lama para penetrar en la pared.