¿Te gustaría crear ambientes rústicos en tu hogar? Las vigas decorativas son el complemento perfecto para dar calidez a algunas estancias de tu casa, decorar o cubrir aquellas imperfecciones del techo. Suelen instalarse en zonas como buhardillas o techos abovedados, pero son adaptables a todo tipo de hogares y espacios, como paredes, consiguiendo efectos muy interesantes.
¡Descubre todo lo que debes saber!
Su apariencia y lograda imitación a la madera ha convertido a las vigas decorativas en uno de los complementos estéticos más usados para adornar techos y buhardillas.
Representan la solución ideal para crear ambientes rústicos o realizar contraste en hogares modernos donde imperan los muebles de vanguardia.
También se utilizan para resolver con originalidad problemas funcionales de los techos (esconder cables o tubos, tapar grietas…) mejorando el aspecto del hogar. ¿Cómo?
Las vigas decorativas están fabricadas con poliuretano, un material ligero, que proporciona facilidad en el trabajo de instalación y soportan perfectamente la humedad y los cambios de temperatura.
Las encuentras en diferentes acabados: nogal, miel y prepintadas en color blanco. Estas últimas ofrecen un ambiente más moderno allá donde se instalan y, además, permiten personalizarlas a tu gusto con pintura acrílica.
En cuanto a sus dimensiones, las vigas más comunes son:
En las vigas huecas podrás ocultar cables eléctricos o tubos. El hueco disponible en su interior es de:
Si necesitas renovar el aspecto del propio techo, puedes utilizar paneles de techo lisos o de imitación madera que te ayudarán a revestir los espacios entre las vigas.
Los encuentras en tamaños de 3 metros de largo por 27,5 cm de ancho y 3 cm de grosor, en colores nogal y miel.
Los remates más frecuentes cuando se instalan vigas decorativas son aquellos que requieren la aplicación de una masilla especial facilitada generalmente con las vigas. Esta masilla se suele utilizar cuando las irregularidades de techos o paredes lo requieren. Puedes encontrar masilla de montaje para el pegado de las vigas y un mastic de relleno pintable para realizar uniones o rellenar.
Además, una vez colocadas las vigas en su lugar, puedes proceder a la instalación de sus complementos o molduras específicas, como las ménsulas que debes pegar al extremo de la viga que desees escogiendo la del tamaño idóneo a la viga que estés trabajando; o las cintas de unión, de efecto metal, que te servirán para esconder la unión entre diferentes vigas o simplemente, para decorar.
Las cintas de unión se instalan con mucha facilidad. Van pegadas a la viga con un adhesivo. En el caso de ser una viga de pequeñas dimensiones, además, deberás de clavar tres clavos sin cabeza con tal de mejorar la sujeción de la cinta. Para vigas de mayor tamaño será necesaria la instalación de 3 tacos por viga, atornillados al techo en forma de zigzag.
Las vigas no exigen más mantenimiento que su limpieza. Si durante la instalación se produce algún arañazo, se puede reparar con un tinte específico, tanto para madera como para poliuretano.