El hierro, es junto con la madera y el ratán, el material más utilizado en la fabricación de estructuras, puertas y muebles, sobre todo para aquellos que son de exterior, ya que se trata de un material muy resistente a las inclemencias meteorológicas.
Las pinturas y esmaltes antióxido son los productos adecuados para mantener las estructuras metálicas y de hierro en perfecto estado. Proporcionan una fuerte protección frente al óxido que debilita estos materiales.
Son fáciles de aplicar y por suerte el mercado nos ofrece multitud de colores y acabados.
Elige la pintura que más te conviene en función del acabado que quieras que luzcan tus objetos y del tipo de superficie que sea.
Pinturas para hierro con acabado liso:
Pinturas para hierro con acabado forja o martelé:
Pinturas multisuperficies:
Imprimaciones para superficies no ferrosas:
Por lo general, las puertas de los garajes, rejas, cercados, muebles de jardín… están fabricadas en aluminio, acero… lo que hace que sean altamente resistentes a los cambios de temperatura, humedad y a la intemperie.
A pesar de ser materiales resistentes, precisan de un cuidado y mantenimiento con el fin de garantizar su durabilidad y buen estado.
A la hora de tratar estos materiales tenemos que valorar el estado en el que se encuentran y cuál es el mejor tratamiento que le debemos dar.
Lo ideal, para pintar cualquier superficie metálica o de hierro es que elijas una pintura o esmalte antióxido. Esta la podremos aplicar directamente sobre el hierro en bruto, superficies nuevas o con pintura vieja, siempre y cuando ésta esté bien adherida o la hayamos decapado y limpiado correctamente si estaba deteriorada.
Los esmaltes van a protegerlos de la oxidación y los podemos encontrar en distintos acabados, colores lisos, mates, brillos o satinados o acabado en forja o martelé. Los aplicaremos fácilmente con brocha, rodillo o pistola.
La solución para una superficie más deteriorada es dar primero una imprimación antióxido, con una capa suele ser suficiente, y seguidamente aplicaremos el esmalte.
La imprimación no ayuda a preparar la superficie antes de pintarla. Si lo que buscamos es mantener el color original de la pieza aplicaremos un barniz incoloro con protección antióxido, por el contrario si lo que queremos es crear un efecto envejecido, aplicaremos una pátina especial para metales y con protección antióxido.
Por último, si lo que queremos es ahorrar y tenemos distintos muebles o elementos de distintos materiales, la mejor opción son las pinturas multisuperficies, aptas tanto para madera, metal, hierro…, de esta manera podemos arreglar ¡distintos muebles únicamente comprando un producto!